La Institución
|La Institución
Tanto el Modelo Educativo como el Enfoque Pedagógico del Institución Educativa La Inmaculada Concepción se inspira en el Carisma, Principios, Características de la Educación y en la Tradición Pedagógica; en los retos y demandas que exigen la sociedad moderna y, en los enfoques educativos actuales.
El Enfoque Pedagógico atendiendo el Carisma, las Características de la educación centra su atención en la formación de la fe teniendo la pastoral como centralidad del proceso enseñanza – aprendizaje.
Desde una visión antropológica cristiana nuestro Enfoque Pedagógico asume la formación integral del estudiante desarrollando en él: competencias, capacidades, destrezas, habilidades intelectuales – afectivas y socioculturales, valores – actitudes, que le permita desenvolverse en el siglo XXI a través del aprender a aprender, aprender a hacer, aprender a convivir con los demás y aprender a ser.
Todo ello orientado a formar líderes cristianos, ciudadanos con participación activa en la identificación y propuestas de solución de problemas tanto personales como de su entorno y el cuidado del medio ambiente. Nuestro Enfoque Pedagógico además resalta el aprendizaje a lo largo de todo el proceso vital por lo que nuestros estudiantes deberán estar en condiciones de aprovechar y utilizar durante toda la vida cada oportunidad que se le presente de actualizar, profundizar y enriquecer el conocimiento y de adaptarse a un mundo en permanente cambio utilizando diversos medios y recursos que proporciona las tecnologías de información y comunicación (TIC).
Atendiendo esta realidad, es que promueve el aprender a aprender a través de la adquisición de los instrumentos o herramientas esenciales para este aprendizaje continuo; el aprender a hacer mediante actividades significativas que lo vincule con la realidad y le permita su transformación; el aprender a vivir juntos en donde se privilegie la formación y vivencia de valores que le permita participar democráticamente y cooperar con los demás en todas las actividades humanas demostrando aceptación, integración e inclusión y; el aprender a ser orientado a desarrollar su espíritu interior que favorezca el conocimiento propio, su autonomía, creatividad, criticidad, juicio prudente y la realización de su proyecto de vida no sólo para su beneficio sino para el bien común.